viernes, 23 de octubre de 2009

Hipnosis y comunicación: El ritual del amor

El breve párrafo que transcribo a continuación, es un fragmento de un ensayo que escribí hace algunos años para una materia, mientras cursaba mi carrera de grado. Formaba parte de una entrega grupal. Por esos días estaba haciendo muchas cosas a la vez, tenía dos trabajos y estaba inscripto en cinco materias. Lo escribí a las 3 de la mañana, medio dormido, quizás afectado por alguna que otra copa de vino, mientras chateaba con el resto del equipo. Disfrútenlo:

"Es necesario considerar que la hipnosis es un tipo de comunicación, más que un ritual. Podemos comprenderla como un intercambio más que como un estado. El terapeuta dirige a otra persona a cambiar espontáneamente su conducta. Es necesario que se produzca una reducción de la resistencia. De modo tal que los procesos hipnóticos, juegan, sin que nadie lo busque (es decir, esto ocurre a pesar de cualquier intencionalidad), un rol en los intercambios comunicativos de todas las personas en la vida cotidiana. Cada uno de los procesos de comunicación se manifiesta en el feedback de todos los días. Si profesionalmente existen métodos de relajación para quebrar las resistencias de los pacientes, esto ocurre también cuando dos personas intentan seducirse, o cuando un vendedor intenta convencer a su potencial cliente. Si en la hipnosis se persiguen cambios perceptivos, emocionales y motores, entonces estamos prontos a reconocer que esto también ocurre en el intercambio social cotidiano. Por ejemplo, siguiendo con el ejemplo anterior, podríamos pensar en la mirada del seductor o en el aumento de la frecuencia de latidos en el corazón de la seducida, o también en las gotas de sudor concomitantes al instante del contacto entre los cuerpos... contacto que nos trae a colación el mejor ejemplo de rapport en la vida cotidiana que se puede nombrar, que es esa hipnosis entre la pareja en su momento de mayor pasión, dado que se da en ese caso la mas notable interrelación armónica que puede haber entre dos individuos, las sugestiones (quizás recíprocas atendiendo a este ejemplo) no ofrecen ningún tipo de resistencia, la credulidad y la confianza son totales. El estado de trance puede llegar ha configurar un estado emocional que de cuenta de una interrelación intensa, los ojos en los ojos, dos cuerpos siendo de pronto uno solo. Las sensaciones corporales en el momento de la consumación del acto sexual son de lo más intenso que puede haber. Son dos sujetos, los ojos de uno en los ojos del otro, sus cuerpos dentro de sus ojos, el fondo borrado. Sujetos que se (y se) ven. Rapport en su máxima posibilidad, hipnosis en total consumación"

2 comentarios:

  1. Muy cierto don fernando, si Garfinkel y Lacan lo leyeran seguramente estarían de acuerdo con usted (sobre todo si estuviesen vivos, y disfrutando de una stella artois bien helada).

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  2. es un texto que no merece mas que un comentario:
    "el abuso de drogas legales, es tambien un abuso"

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